jueves, 31 de diciembre de 2015

Vicente Aguirre - Tercera Parte

Seleccionado de la Liga Rosarina de Football hacia el año 1921. Vicente Aguirre, que es el cuarto agachado de izquierda a derecha, a su lado lo tiene a Gabino Sosa. 
Su actuación en el combinado rosarino
Hizo su debut en la selección de la Liga Rosarina en 1921 en un encuentro válido por la copa Mariano Reyna, frente a un combinado de jugadores porteños de la Asociación Argentina de Football. El cotejo se efectuó el 30 de agosto en la cancha de Newell’s y el cuadro rosarino, que se impuso por 2 a 0, alineó a Octavio Díaz; Adolfo Celli y Florindo Bearzotti; Francisco Ballart, Víctor Balbuena y Juan de Dios Olivieri; Julio Libonatti, Eduardo Bonzi, Blas Saruppo, Vicente Aguirre y Gabino Sosa. Los goles fueron marcados por Saruppo y Gabino Sosa. Ese mismo año volvió a integrar el seleccionado rosarino que derrotó nuevamente a Buenos Aires por 1 a 0 por la copa Culaciatti, en un encuentro jugado en la cancha de Boca Juniors. Por aproximadamente una década fueron muchos los goles que anotó defendiendo los colores de la selección de la Liga Rosarina de Football. Una clara muestra de su efectiva capacidad goleadora la demostró cuando le asestó seis goles en tres partidos al combinado porteño.
Los tres goles a Uruguay
Uno de sus mejores partidos que disputó con la selección de la Liga Rosarina se llevó a cabo el 1º de julio de 1923 ante la selección de Uruguay en Montevideo. Esa tarde el chueco Aguirre realizó una magnífica hazaña, ya que aportó los tres tantos en el notable triunfo rosarino por 3 a 1. Anotó el primer gol faltando siete minutos para la culminación del primer período, cuando recibió un pase de Gabino Sosa y esquivó a los defensores, para sacar un fuerte disparo que quebró la resistencia de Beloutas, arquero uruguayo. Luego en el segundo tiempo los locales lograron rápidamente igualar el marcador, pero sobre el epílogo del encuentro entró nuevamente en acción Vicente Aguirre, quien mandó al fondo de la red el balón en dos oportunidades más para sentenciar el resultado en favor de su equipo. Los once jugadores que plasmaron la proeza fueron Bernardino Nuin; Adolfo Celli, Florencio Sarasíbar; Alfredo Chabrolín, Filedolfo Salcedo y Jacinto Perazzo; Antonio Macías, Antonio Miguel, Gabino Sosa, Vicente Aguirre y  Juan Francia. Días después siguiendo su senda goleadora le convirtió dos goles a la selección de la Liga Santiagueña de Fútbol (de Santiago del Estero), en un cotejo que finalizó con victoria de Rosario por 3 a 1.
La selección Argentina
Formación de la selección Argentina el día que venció a Paraguay en el Campeonato Sudamericano de 1923. Vicente Aguirre es el cuarto de izquierda a derecha. 
Sus buenas performances lo llevaron a ser convocado para vestir la camiseta albiceleste de la selección nacional, donde disputó cuatro cotejos en los cuales anotó la misma cantidad de goles. Allí también se desempeñó como insider izquierdo (vale aclarar que antes se jugaba con cinco delanteros). Su mejor encuentro en la selección Argentina lo jugó el 29 de octubre de 1923 por el campeonato Sudamericano en Montevideo ante Paraguay. Ese día fue la gran figura de la tarde, ya que señaló tres tantos en la victoria del combinado argentino por 4 a 3. En una entrevista que le realizaron al destacado futbolista Cesáreo Onzari sobre el desempeño de la selección en ese partido, destacó las aptitudes del crack rosarino. Ante la pregunta de qué le había parecido la actuación de Vicente Aguirre, Onzari contestó lo siguiente: “Uno de los delanteros más completos que he visto hasta el presente. Tiene un dribling desconcertante, un shot (un remate) seguro, fuerte y rápido. Es veloz y además es un caballero en la más amplia acepción de los vocablos”. Con esas gratificantes palabras definió al chueco, el delantero de Huracán que en 1924 entraría en la historia por convertirle el primer gol olímpico a los uruguayos.
Aguirre también fue titular en los dos partidos siguientes del torneo, en la victoria por 2 a 1 ante Brasil y en el traspié frente al combinado local por 2 a 0. Asimismo es menester añadir que fue subcampeón en dicho torneo, además compartió el honor junto al uruguayo Pedro Petrone, de ser los máximos goleadores del certamen.
El otro cotejo en donde se calzó la casaca albiceleste se llevó a cabo el 25 de mayo de 1924. En esa ocasión integró el equipo que goleó a Uruguay por 4 a 0, por la copa Newton, anotando uno de los goles.
Retiro de la actividad futbolística
Luego de alejarse de Central Córdoba en el año 1933, Vicente Aguirre se retiró del fútbol en Sportivo Rivadavia de San Genaro Norte, donde disputó algunos partidos en 1934, siendo su última temporada como futbolista. Posteriormente radicado en la ciudad de Santa Fe, el chueco falleció el 11 de junio de 1990 a los 89 años. A lo largo de su exitosa carrera se desempeñó como insider izquierdo, aunque a veces también lo hizo de wing, tanto por el sector izquierdo como por el derecho. Llegando en ocasiones a jugar como centro delantero (centrofoward, tal como se decía en aquella época). Asimismo es importante señalar que en todos los lugares en donde estuvo cosechó grandes amistades debido a su excelente comportamiento dentro y fuera de la cancha.

Vicente Aguirre (el cuarto de abajo) con el equipo de Sportivo Rivadavia de San Genaro Norte, hacia finales de su carrera futbolística.

Agradecimiento especial para Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre, hijo y nieto respectivamente del formidable delantero Vicente Aguirre, que gentilmente nos brindaron datos y fotos para la realización de esta nota. 

domingo, 25 de octubre de 2015

Vicente Aguirre - Segunda Parte

 Sus años en La Lepra  
Foto 1
Llegó a la entidad del Parque de la Independencia en 1925. En su primer año en Newell’s jugó 26  partidos por la copa Vila y anotó la elevada cifra de 34 goles. Asimismo por la copa Estímulo, en la cual se coronó campeón, disputó dos encuentros, marcando en ellos cuatro tantos.
Asimismo integró el elenco leproso que el 20 de diciembre de 1925 empató en su cancha ante la selección de Brasil 2 a 2 en un compromiso amistoso. Ese no fue el único partido internacional que disputó con la camiseta rojinegra, ya que el domingo 17 de julio de 1927 le anotó dos goles nada más ni nada menos que al poderoso Real Madrid de España, en la goleada por 4 a 0 que Ñuls le propinó al conjunto merengue en un cotejo amistoso jugado en el parque. El chueco marcó los dos primeros tantos de la tarde a los 13’ y 47’. Luego completaron la faena Humberto Libonatti (55’) y Juan Francia (70’). La formación de La Lepra ese día que vapuleó a los madrileños fue con Bernardino Nuin; Ángel Rizzi y Florindo Bearzotti; Alfredo Chabrolín, Carlos Villa y Miguel Castagno; Agustín Peruch, Humberto Libonatti, Alfredo Frei, Vicente Aguirre y Juan Francia.
Prosiguiendo con el torneo local, vale señalar que en la copa Vila de 1926, en la cual Newell’s culminó segundo a tres unidades de Tiro Federal, Aguirre fue el goleador de su equipo y del torneo con 36 goles marcados en 23 encuentros jugados. En varios de los cotejos señaló más de un tanto. Sus mejores tardes fueron ante Talleres, a quien le convirtió cuatro veces en el aplastante triunfo  por 14 a 1, frente a Riberas del Paraná de Villa Constitución, anotándoles cinco, en la victoria de su cuadro por 6 a 0. Sin dejar de mencionar que en el partido que Ñuls apabulló nuevamente al débil Talleres por 10 a 0, aportó seis goles. Posteriormente en 1927 señaló diez tantos en trece partidos disputados, entre copa Vila y copa Schlau. Mientras que en 1928, su último año defendiendo los colores de la divisa rojinegra mandó la pelota al fondo de la red cuatro veces, en seis cotejos que jugó en el campeonato rosarino de primera división.
En total disputó en Newell’s Old Boys setenta partidos, señalando la elevada cifra de ochenta y nueve goles.
Retorno al charrúa
La vuelta del chueco Vicente Aguirre a Central Córdoba se produjo en 1929. Esta segunda etapa en el charrúa fue la más exitosa en cuanto a títulos obtenidos (aunque según nos contaron su hijo y nieto, él siempre decía que su primer etapa en el club de Tablada fue la mejor, debido a la cantidad de goles que señaló), ya que se dio el gusto de obtener dos campeonatos (el torneo eliminatorio en 1931 y el Molinas de 1932) con el club de sus amores en la máxima categoría del fútbol rosarino profesional.
En la temporada de su regreso a Tablada fue subcampeón de la copa Vila, tras perder recién en un desempate frente a Newell’s (habían igualado en el primer puesto de la tabla de posiciones). Al año siguiente se erigió como el máximo artillero del campeonato Vila y por tal proeza fue galardonado con una medalla de oro, que estaba adornada con un brillante incrustado, que le fue entregada por el diario La Tribuna y la casa Girolami, donde fue acuñada. A la ceremonia asistieron varios colegas, dado el gran afecto que se supo ganar tanto dentro como fuera de la cancha. En 1931 se coronó campeón del torneo de Competencia de la A. R. F. (un antecesor de la copa Ivancich). Tras dejar en el camino primero a Provincial y luego a Newell’s (2 a 1), el cuadro charrúa venció en la final a Tiro Federal, al imponerse por 4 a 0. El chueco Aguirre anotó dos conquistas en la goleada, marcando el segundo y el cuarto tanto, mediante sendos remates cruzados.
En la foto aparecen cuatro de los cinco integrantes de una famosa delantera charrúa de principios de los años ’30. Aparecen de izquierda a derecha, Medina, Morales, Gabino Sosa y Vicente Aguirre. Gentileza de Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre. 

Luego en 1932 logró consagrarse campeón del torneo Gobernador Molinas, correspondiente a la primera división de la Asociación Rosarina de Fútbol. Además se acentuó como el máximo goleador del equipo de Tablada, tras haber señalado alrededor de 167 tantos entre sus dos etapas como jugador charrúa. Cabe remarcar que es muy probable que haya anotado aún más goles, pero no quedaron registros de ellos. Si se suman además los tantos que señaló en Newell’s y los distintos combinados que integró, la cifra de goles que anotó superarían los doscientos, siendo así difícil de igualar. 


Foto 1: El chueco vistiendo la casaca rojinegra en su paso por Newell’s Old Boys. Gentileza de Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre. 

Agradecimiento especial para Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre, hijo y nieto respectivamente del formidable delantero Vicente Aguirre, que gentilmente nos brindaron datos y fotos para la realización de esta nota.
También agradezco la colaboración de Julio Rodríguez, historiador del Club Atlético Central Córdoba.

viernes, 23 de octubre de 2015

Feliz centenario Club Atlético Fisherton

En el día de la fecha se cumplen cien años de la fundación del club Fisherton, una prestigiosa institución de la ciudad de Rosario, que hoy en día no practica fútbol, pero que en otros tiempos formó parte de los torneos de la antigua Liga Rosarina de Football y de la Asociación Rosarina de Fútbol. 

Elenco de Fisherton en 1929.
Sus comienzos.

Un grupo de aficionados del entonces aristocrático barrio de Fisherton, donde únicamente se conocía el campo de golf, que atendía un tal José Duca (ahora perteneciente al Rosario Golf Club), decidió instaurar un club de fútbol.
Después de varios esfuerzos pudieron reunirse en el bar Radium CAF (ubicado en la calle Salta 1727); donde concurrieron unos diez entusiastas emprendedores.
Los hermanos Emilio, José, Luis y Jacinto Fenner, junto a  José Luis Pratolongo (éste último fue su primer presidente), fueron los principales propulsores para la creación de la nueva entidad, que fijó fecha de fundación el 23 de octubre de 1915.
Recién en 1923 se afilió a la Liga Rosarina de Football, para desempeñarse en la segunda categoría. Luego en 1929 tuvo una breve estadía en primera; en 1930 regresó a la división inferior, donde permaneció hasta la segmentación del fútbol rosarino en 1931. Ingresó a la Asociación Rosarina de Fútbol en 1935, para actuar en Intermedia. Posteriormente se desafilió en 1937 para dedicarse a otras actividades deportivas. Luego décadas más tarde volvió a intervenir en los torneos de la A. R. F., hasta su desafiliación, acaecida a principios de los años '90. 
Su campo de deportes se levantó en la calle Colombres y 5. En la actualidad su sede social se sitúa en la calle Chassaing 1650.
La indumentaria que lo caracterizó era celeste y granate a rayas verticales finitas.

lunes, 12 de octubre de 2015

Vicente Aguirre, el chueco charrúa - Primera Parte


Vicente Aguirre con la camiseta de Central Córdoba en el año 1919. Foto gentileza de Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre.

Vicente Aguirre, apodado el chueco, nació en Rosario el 22 de enero de 1901. Se crió en el barrio Echesortu, donde también surgieron otros notables futbolistas de la época, como los hermanos Julio y Humberto Libonatti, que posteriormente brillaron en Newell’s.  
En 1916, cuando contaba con quince años de edad, comenzó a jugar al fútbol en las divisiones inferiores de Rosario Central. Primero integró el equipo de cuarta división, que no obtuvo una posición destacada en la tabla, pero luego en 1917 se consagró campeón del torneo de tercera división, con el cuadro canalla. En el partido final de dicha categoría Aguirre señaló dos goles en el tiempo suplementario que le dieron la victoria a su equipo por 3 a 1 ante Gimnasia y Esgrima C.
En Rosario Central llegó a jugar sólo un partido en primera, fue en el campeonato Vila de 1917, en el triunfo auriazul por 7 a 1 frente a Provincial. Esa tarde del domingo 6 de mayo se desempeñó en su puesto de insider izquierdo. Cabe añadir que los goles canallas fueron señalados por Harry Hayes en cuatro ocasiones, Ennis Hayes en dos y la restante conquista la marcó José Clarke.
Después dejó Arroyito y se marchó rumbo a Tablada. Su debut oficial con la casaca azul de Central Córdoba se produjo el domingo 30 de marzo de 1919 por la primera fecha del campeonato de primera división de la Liga Rosarina de Football. Esa tarde cayó derrotado por 4 a 1 ante Rosario Central y Aguirre señaló el único tanto de su cuadro. La alineación charrúa fue la siguiente: Videla; Zárate, Fernández; Reynoso, Pedraza, Julio Tissera; Sanabria, Bolten, Gabino Sosa, Vicente Aguirre y Ernesto Yeoman.
Según palabras del chueco en una entrevista publicada en el diario La Tribuna del 10 de enero de 1931, se estrenó en su nuevo club frente a Newell’s Old Boys en el parque. Los charrúas no tuvieron una buena tarde y fueron categóricamente goleados por 7 a 2 (seguramente fue un cotejo amistoso, ya que no correspondió a la copa Vila). Asimismo agregó que enfrentó en un encuentro amistoso a Gimnasia y Esgrima de Rosario, que contaba entre sus filas con un compañero de su barrio natal, Humberto Libonatti. Los dos tuvieron una actuación sobresaliente y compitieron por quien anotaba más goles. Finalmente la apuesta la ganó Humberto, quien señaló cinco tantos, en la victoria de su elenco por 6 a 5. Mientras que Vicente Aguirre aportó cuatro goles a su equipo.
Según nos contaron Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre, hijo y nieto respectivamente del chueco, él siempre decía que su primer paso por el club de Tablada fue el mejor de su carrera, por la cantidad de goles que señaló.
Vale mencionar que en Central Córdoba permaneció hasta 1924, ya que al año siguiente pasó a las filas de Newell’s Old Boys.
Formación de Central Córdoba en 1920, con el chueco Aguirre agachado en el centro de la imagen. Foto gentileza Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre. 


Agradecimiento especial para Oscar Vicente Aguirre y Oscar Walter Aguirre, hijo y nieto respectivamente del formidable delantero Vicente Aguirre, que gentilmente nos brindaron datos y fotos para la realización de esta nota.
También agradezco la colaboración de Julio Rodríguez, historiador del Club Atlético Central Córdoba y de Carlos Durhand, por datos aportados. 

jueves, 24 de septiembre de 2015

Argentino campeón rosarino de 1948

El elenco salaíto que venció a Central por 1 a 0 en el Molinas de 1948.
El Club Atlético Argentino logró en el año 1948 su segundo título en la máxima categoría del fútbol rosarino, tras consagrarse campeón del torneo Gobernador Molinas. En un reñido certamen sumó veintiocho unidades y aventajó solamente por un punto a su tradicional rival, Central Córdoba, que fue su escolta. En total el elenco salaíto jugó dieciocho partidos, de los cuales ganó doce, empató cuatro y perdió sólo dos. Anotó cincuenta tantos y le convirtieron diecisiete.
Un triunfo clave para la obtención del título, fue el que consiguió ante Rosario Central  en Arroyito, donde se impuso por 1 a 0 con un tanto señalado por Juan Rodríguez a los 17’. Esa victoria frente a la primera local canalla lo afianzó como líder del certamen a pocas fechas de su culminación.
Cabe destacar que ese año fue muy fructuoso a nivel local para el conjunto albo, ya que previamente había obtenido la copa Ivancich.
El plantel de Argentino que se consagró campeón del Molinas estuvo compuesto por Luis Masuelli; Ernesto Wendt, Julio Felipe, Virginio, Armando Mujica, Elvio Negro, Luis Bazzani, Mario Casagrande, José Quevedo, Mario Pereyra, José López, Manuel Canabal, V. Masariego, Juan Prarizzi, Horacio Rivara, Ramón Guerín, Floduardo Micci, Rubens Pirona, Juan Magdalena, Juan Cóllere, Ramón Palavecino y Juan Rodríguez.


Posiciones torneo Gobernador Molinas 1948
1º Argentino 28
2º Central Córdoba 27
3º Rosario Central 24
4º Unión de Álvarez 24
5º Newell’s Old Boys 19
6º Provincial 17
7º Saladillo 15
8º Tiro Federal 15
9º Sparta 9
10º Belgrano 2

La campaña del salaíto
Vs. Central Córdoba 2-2 (L)/ 4-1 (V)
Vs. R. Central 3-1 (L)/ 1-0(V)
Vs. Unión (A) 0-0 (L)/ 0-1(V)
Vs. Newell’s 1-2 (L)/ 3-0 (V)
Vs. Provincial 4-3 (L)/ 2-2 (V)
Vs. Saladillo 2-1 (L)/ 3-0 (V)
Vs. Tiro Federal 1-1 (L)/ 3-0 (V)
Vs. Sparta 6-2 (L)/ 8-0 (V)
Vs. Belgrano 3-1 (L)/ 4-0 (V) 

martes, 15 de septiembre de 2015

Rosario Central subcampeón de la copa Competencia Jockey Club 1919 - Segunda Parte

Formación de Rosario Central en 1919.
El domingo 28 de diciembre se llevó a cabo la primera semifinal de la copa Competencia Jockey Club entre Boca Juniors y Belgrano, en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, en el barrio de Palermo. Los dos conjuntos ya se conocían, puesto que el 2 de noviembre habían jugado un partido amistoso, en el estadio de Boca, donde los rosarinos se impusieron contra todo pronóstico por 3 a 1. A pesar de ello, el equipo papero no pudo repetir la hazaña en el duelo semifinal, ya que el conjunto xeneize  lo venció por 2 a 0, con goles de Bozzo a los 20’ y Garasini a los 89’. Cabe añadir que Jorge Repucci, arquero del cuadro celeste, le contuvo un penal a Pedro Bleo Fournol, más conocido como Calomino, notable delantero boquense por aquellos lejanos años.
El otro compromiso válido por las semifinales del certamen, se efectuó recién en enero de 1920, más precisamente el domingo 4. En la cancha de Newell’s Old Boys, Rosario Central apabulló con total holgura al débil Eureka por el abultado marcador de 7 a 0. Gracias a una magnífica actuación de los hermanos Hayes, que entre ambos convirtieron seis goles (cuatro Ennis y dos Harry) y a la restante conquista de Antonio Blanco de penal, el elenco auriazul se clasificó finalista sin mayores inconvenientes.
El partido final entre Boca Juniors y Rosario Central despertó un gran interés entre el público asistente al estadio de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires. En un encuentro sumamente parejo, el cuadro rosarino puso en riesgo al guardavalla xeneize en varias ocasiones, pero no logró convertir. Al cabo de los noventa minutos reglamentarios el marcador permaneció inalterable. Luego en el primer período suplementario tampoco se abrió el tanteador. Las emociones quedarían reservadas para el segundo tiempo de la prórroga. A los 12’ el mediocampista xeneize, José Alfredo López derribó en su propia área a Antonio Miguel, cometiéndole penal, que el juez Calixto Gardi, no dudó en sancionar. La pena máxima la ejecutó Antonio Blanco, que con su disparo hizo lucir a Américo Tesoriere, arquero boquense, que contuvo el remate. Un minuto después el jugador canalla Rodolfo Mulhall bajó a Pedro Miranda y el árbitro cobró un nuevo penal, esta vez a favor del equipo porteño. El encargado de patearlo fue Calomino, que decretó el tanto del triunfo de Boca Juniors por 1 a 0. Esa victoria le valió el derecho de disputar el trofeo Chevallier Boutell, ante el vencedor de la copa Competencia de Uruguay. Dicho encuentro se jugó el 25 de mayo de 1920 y Boca derrotó a Nacional de Montevideo por 2 a 0, en la cancha de Sportivo Barracas, adjudicándose la copa Competencia internacional. 

Cuartos de Final
R. Central 3 – Tiro Federal 1
Belgrano 2 – Central Córdoba 0
Eureka 1 – Sportivo Almagro 0
Boca Juniors 3 – Porteño 2

Semifinales
Jugado el domingo 28 de diciembre de 1919
Boca Juniors 2: Américo Tesoriere; Antonio Roque Cortella y José Ortega; José Alfredo López, Mario  Busso y Alfredo Elli; Pedro Calomino, Pablo Bozzo, Alfredo Garasini, Alfredo Martín y Pedro  Miranda.
Belgrano 0: Jorge Repucci; Gabriel Mujica y Florindo Bearzotti; Francisco Ballart, Bruno Zanini y Fernando Pancirolli; Juan Cíntora, Dante Bianchi, Bernardo Pambrún, Manuel Antuña y Silvio Bearzotti.
Goles: 20’ Bozzo y 89’ Garasini (ambos de Boca Juniors).
Incidencias: 11’ Repucci (B) le detuvo un penal a Calomino (BJ).
Cancha: Gimnasia y Esgrima de Bs. As.
Equipo de Belgrano que realizó una notable campaña en la copa Competencia de 1919.
                                  
Jugado el domingo 4 de enero de 1920
Rosario Central 7: Octavio Díaz; Patricio Clarke y Florencio Sarasíbar; Rodolfo Mulhall, Patricio Furlong y Jacinto Perazzo; Antonio Blanco, Ernesto Guaraglia, Harry Hayes, Ennis Hayes y Antonio Miguel.
Eureka 0: Díaz; Baigorri y Gaete; Perenchi, Lucena y Scofano; Bianatti, Acosta, Lucarelli, Larrulu y Frumento.
Goles: Ennis Hayes (4), Harry Hayes (2) y Antonio Blanco, de penal (todos de R. Central). (*)
Cancha: Newell’s Old Boys.
Árbitro: Cúneo (Asociación Argentina de Football).
Hora: 15. 45 hs.
Público: alrededor de 5.000 espectadores.

(*) Hay una controversia en cuanto a los autores de los goles en ese partido, ya que el diario La Acción publicó que Ennis Hayes marcó cuatro goles y Harry Hayes hizo dos, mientras que La Capital mencionó que Ennis señaló cinco tantos y Harry uno.

Boca Juniors se consagró campeón de la copa Competencia a nivel nacional y luego venció a Nacional de Montevideo.
Final
Disputada el domingo 18 de enero de 1920.
Boca Juniors 1: Américo Tesoriere; Antonio Roque Cortella y José Ortega; José Alfredo López, Mario  Busso y Alfredo Elli; Pedro Calomino, Pablo Bozzo, Alfredo Garasini, Alfredo Martín y Pedro  Miranda.
Rosario Central 0: Octavio Díaz; Patricio Clarke y Florencio Sarasíbar; Rodolfo Mulhall, Patricio Furlong y Jacinto Perazzo; Antonio Blanco, Ernesto Guaraglia, Harry Hayes, Ennis Hayes y Antonio Miguel.
Gol: 103’ Calomino, de penal (Boca Juniors).
Incidencia: 102’ Tesoriere (BJ) le atajó un penal a Blanco (RC).
Cancha: Gimnasia y Esgrima de Bs. As.
Árbitro: Calixto Gardi. 

jueves, 10 de septiembre de 2015

Faustino González, autor del primer gol en la historia del clásico rosarino

Faustino González en 1905, año en que pasó a la historia, tras anotar el único tanto en el primer clásico disputado entre Newell’s y Central.
Faustino González nació el 9 de agosto de 1883, en la ciudad de Rosario. Siendo hijo del matrimonio de Basilio González y Josefa Requeiro. Vivió desde chico en una casa de la calle Callao 872. Curso sus estudios en el colegio Comercial Anglo Argentino, situado en la calle Entre Ríos 139. Allí fue un alumno distinguido, que dominó con excelencia el idioma inglés. Además se destacó en lo deportivo, integrando los equipos del club Newell’s School, que era parte del colegio y tenía su cancha detrás del mismo, sobre la calle Jujuy, entre Mitre y Entre Ríos. Fue ahí donde aprendió el arte de éste magnífico deporte, llamado fútbol, o en aquellos remotos tiempos football.
Asimismo vale añadir que Faustino, como muchas personas en su época, fue ferroviario, ya que a los 25 años ingresó a trabajar en los Almacenes del Ferrocarril Central Argentino, donde permaneció hasta su jubilación, acaecida en el año 1933.
Socio fundador de Newell’s
Faustino fue uno de los fundadores de Newell’s Old Boys, ya que estuvo presente en la histórica reunión en la escuela de don Isaac Newell, donde un nutrido grupo de jóvenes le dio vida a la entidad rojinegra.
Posteriormente en el año 1905 fue parte del equipo de Newell’s Old Boys, que disputó la copa Pinasco, primer torneo que puso en juego la Liga Rosarina de Football. En dicho torneo se consagró campeón, siendo una de las figuras del equipo.
Goleador del primer clásico
El domingo 18 de junio de 1905 se midieron por la copa Pinasco, Newell’s Old Boys y Rosario Central. Esa histórica tarde se registró el primer enfrentamiento entre los dos clubes más representativos de la ciudad de Rosario. Alrededor de dos mil quinientas almas asistieron al cotejo, que se llevó a cabo en Plaza Jewell. Luego de un primer período reñido, que culminó sin goles, se fueron al descanso. En la segunda parte del partido, Faustino González recibió un pase de Víctor Heitz y remató al arco rival, venciendo a Norris, guardameta de Central. Con ese gol inmortalizó su nombre, al anotar el único tanto del encuentro, que le dio la victoria por 1 a 0 al elenco rojinegro. Quizás luego del partido no imaginó la magnitud de lo que había logrado, ya que la rivalidad entre ambos equipos fue creciendo agigantadamente con el correr de los años.
La formación de Newell’s ese día fue con José Caloso, José Hiriart y Deolindo Barcelone; Wallace W. Wheeler, Agapito Balbiani y Guillermo Renny; Víctor Heitz, Guillermo Moore, Faustino González, José Viale y A. Lyon Pats.
En tanto que Rosario Central alistó a Norris; A. Faggiani y J. H. Grant; Juan Díaz, A. Ellison y H. Boan; W. Whortley, Antonio Vázquez, Pedro Heamett, Stanley Hooper y Percy Jones, siendo el encargado de impartir justicia el señor Ricardo Olavarría Le Bas.
Los hermanos sean unidos
Uno de los privilegios que gozó Faustino González en sus años como futbolista, fue el de haber vestido junto a sus hermanos la camiseta de Newell’s Old Boys. Manuel Paulino, debutó en 1906 y Caraciolo lo hizo en 1908. Los tres hermanos González jugaron juntos hasta 1913, cuando Faustino y Caraciolo dejaron la actividad. Manuel, apodado Lito, prosiguió hasta 1915, retirándose del cuadro leproso con la cifra record de haber marcado 158 tantos, en 120 encuentros disputados, siendo el máximo goelador del club en la era amateur.
Ocho años defendiendo los colores rojinegros
Faustino González jugó en Newell’s Old Boys un total de sesenta y seis partidos y señaló treinta y nueve goles. Se desempeñó en su puesto habitual de Centrofoward (delantero centro) desde su debut en 1905 hasta 1913, temporada en la cual sólo disputó un encuentro.
En sus ocho años defendiendo la divisa ñulista, cosechó varios títulos, ya que se consagró campeón en la copa Pinasco de 1905 y 1906, la copa Vila de 1907, 1909, 1910, 1911 y 1913 y de la copa de Honor Municipalidad de Buenos Aires en 1911. Cabe señalar que además de haber sido jugador de la entidad del parque, ejerció el cargo de presidente de Newell’s en dos períodos, el primero entre 1910 y 1911, mientras que desde 1913 a 1914, ocupó el cargo de mandamás leproso por segunda vez.

sábado, 29 de agosto de 2015

Rosario Central subcampeón de la copa Competencia Jockey Club 1919 - Primera Parte

Ennis Hayes.
En el año 1919 Rosario Central realizó una notable campaña en la copa Competencia Jockey Club, ya que llegó a disputar la final ante Boca Juniors, con el cual cayó por la mínima diferencia en un reñido encuentro. Repasemos el desarrollo del certamen. 
En la fase de clasificación rosarina, el elenco canalla superó en la primera instancia a Gimnasia y Esgrima, al que venció por un contundente 3 a 0, en un cotejo disputado el domingo 5 de octubre. Luego en la siguiente ronda, el rival de turno fue Tiro Federal, que había dejado en el camino a Newell’s Old Boys. El cuadro tirolense arrancó abajo en el marcador, pero pudo dar vuelta la historia e imponerse por 2 a 1 en el Parque de la Independencia. Juan Martín había puesto en ventaja al elenco rojinegro, tras cambiar por gol un penal sancionado tras una mano dentro del área de Santiago Morgoux. Pero minutos después Eduardo Bonzi, también desde los doce pasos logró la igualdad. El tanto del triunfo lo señaló Juan Zucca.
Una semana después, es decir el domingo 12 de octubre se enfrentaron Rosario Central y Tiro Federal por los cuartos de final del certamen. El partido se desarrolló sobre un campo de juego lleno de barro, por la lluvia caída durante la mañana en el field tirolense, ubicado entre el bulevar Avellaneda y las calles Humberto Primo y Goosweiler. En el comienzo del cotejo Central dispuso de varias ocasiones para abrir el tanteador, pero se encontró con una gran actuación de Lorenzo Colombo, arquero de Tiro, que evitó con buenas atajadas que su valla sea vencida. Posteriormente a los 20’ Antonio Pimentel anotó para el elenco albiceleste, que se ponía en ventaja por 1 a 0. Cuando faltaban tres minutos para la finalización del período inicial el árbitro Luis Laprida decidió suspender el cotejo, debido al juego brusco y a constantes agresiones del público.  
Asimismo ese mismo día en la cancha del charrúa, Belgrano derrotó a Central Córdoba por 2 a 0 y avanzó de ronda. Los dos goles del equipo papero fueron marcados por Dante Bianchi.
El arquero tirolense, Lorenzo Colombo.
Luego el domingo 19 de octubre a las tres de la tarde se prosiguió el encuentro entre canallas y tirolenses, en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Rosario. El referí esta vez fue Antonio Gaspar. A los nueve minutos Harry Hayes logró el empate en uno, con el que finalizó el tiempo reglamentario. Por tal motivo fue necesaria la disputa de dos períodos extras de quince minutos cada uno. En el suplementario nuevamente Harry Hayes y Ennis Hayes señalaron los tantos del triunfo auriazul por 3 a 1.
Así las cosas, Rosario Central y Belgrano fueron los dos conjuntos rosarinos que obtuvieron el pasaporte para jugar las semifinales del torneo ante los equipos clasificados de Buenos Aires.
Cabe remarcar que la Asociación Argentina de Football tuvo que reprogramar el torneo en la sección porteña, debido a la desafiliación de Racing Club, Defensores de Belgrano, Independiente y Vélez Sarsfield, que eran los clubes que seguían en carrera. Los equipos en cuestión se sumaron a la Asociación Amateurs de Football, por tal motivo se reorganizó la copa con los conjuntos que siguieron afiliados a la Asociación Argentina.
Bajo esas circunstancias Boca Juniors eliminó a Estudiantes de La Plata, tras golearlo por 3 a 0 y Sportivo Almagro superó en el tercer desempate a Huracán por 2 a 0 (previamente habían igualado 2 a 2, 0 a 0 y 1 a 1). Mientras que Porteño y Eureka fueron favorecidos por el sorteo y avanzaron de fase sin jugar.
Posteriormente Boca Juniors, que venció por 3 a 2 a Porteño y Eureka, que derrotó a Sportivo Almagro por 1 a 0, se clasificaron semifinalistas, por ende serían los rivales de los cuadros de Rosario.
El sorteo que se efectuó en la Asociación Argentina de Football determinó que Belgrano visitaría a Boca Juniors y Rosario Central recibiría a Eureka (1).
Nota (1): La Asociación Atlética Eureka fue fundada el 14 de enero de 1915. Asimismo su camiseta era amarilla y negra a rayas verticales. En febrero de 1920 se fusionó con el Club Sportivo Palermo, pasando a tener el nombre de éstos últimos en agosto de ese año.

miércoles, 1 de julio de 2015

Cinco jugadores rosarinos en la selección Argentina campeón del Sudamericano de 1921

La selección Argentina la tarde que venció a Uruguay en la cancha de Sportivo Barracas y logró su primer Campeonato Sudamericano. Calomino, Julio Libonatti, Blas Saruppo, Adolfo Celli, Raúl Echeverría, Américo Tesoriere, José López, Emilio Solari, Miguel Delavalle, Florindo Bearzotti y Vicente González. 
El campeonato Sudamericano de 1921 fue el primero que se adjudicó la Selección Argentina en su historia. Se llevó a cabo en Buenos Aires, donde intervinieron, además del elenco anfitrión, Uruguay, Brasil y Paraguay, que reemplazó a Chile, que a último momento desistió de participar.
La gran figura del conjunto albiceleste fue el rosarino Julio Libonatti, perteneciente a Newell’s Old Boys, quien fue el goleador del torneo y anotó el gol del triunfo en el partido definitorio. Asimismo además del potrillo, formaron parte del equipo campeón, Florindo Bearzotti, del club Belgrano de Rosario, Gabino Sosa, de Central Córdoba, el alemán Adolfo Celli y Blas Saruppo, ambos del equipo rojinegro.  
El partido que abrió el certamen, se jugó el domingo 2 de octubre en la cancha de Sportivo Barracas, que fue el escenario de todos los cotejos del campeonato. Esa tarde Argentina derrotó a Brasil por 1 a 0, con un tanto marcado por Julio Libonatti a los 27’. Según cuentan los periódicos de la época, el payador de la redonda, Gabino Sosa, fue uno de los mejores jugadores del cotejo. Un dato importante fue que la cancha se abarrotó de público, lo que reflejó el gran interés que suscitó el certamen para la afición argentina. Entre los veinte mil hinchas que asistieron al estadio, hubo muchos rosarinos que viajaron hasta Buenos Aires para seguir a la selección nacional, que contaba con varios de sus conciudadanos.
Una semana después Paraguay dio la sorpresa y venció a Uruguay por 2 a 1. Más allá del notable triunfo logrado en su debut, tres días más tarde el combinado guaraní cayó en su segunda presentación frente a Brasil por 3 a 0.
Luego el domingo 16 de octubre la selección nacional goleó a Paraguay por 3 a 0, con tantos señalados por Julio Libonatti al minuto de juego, Blas Saruppo a los 43’ y Raúl Echeverría a los 76’. Con ese resonante triunfo los locales se convirtieron en serios candidatos a quedarse con el torneo. Al domingo siguiente Uruguay le ganó a Brasil por 2 a 1 y llegó con chances al último encuentro.
Así las cosas el domingo 30 de octubre el estadio de Sportivo Barracas se vio colmado de público, ansioso de presenciar el partido definitorio entre Argentina y Uruguay. Hinchas de todos los rincones del país se dieron cita.
Al equipo albiceleste le alcanzaba con un empate para coronarse, mientras que los charrúas necesitaban un triunfo para igualar la primera colocación, ya que sumaban dos unidades, contra cuatro de los argentinos.
Desde el inicio el cotejo fue duramente disputado por los dos clásicos rivales del fútbol rioplatense, que al finalizar el primer período no se sacaron ventajas.
El momento de mayor expectativa de la tarde se vivió a los 21’ del complemento, cuando Blas Saruppo sacó un remate fallido, que el arquero uruguayo Manuel Beloutas no pudo retener, quedándole la pelota servida en los pies a Julio Libonatti, quien con un potente disparo la mandó al fondo de la red, para el delirio de las 40.000 almas presentes. Ese gol, le significó la victoria a la selección Argentina, que se coronó campeón del Sudamericano en su quinta edición. Al terminar el encuentro una multitud invadió el campo de juego, para celebrar junto a los jugadores la tan ansiada conquista.
Momento en que Julio Libonatti señala el gol del triunfo argentino ante Uruguay en el partido definitorio. 
Cabe destacar que además de Julio Libonatti, quien fue llevado en andas desde el estadio hasta la Plaza de Mayo, fueron notables figuras del conjunto nacional, los defensores Florindo Bearzotti y Adolfo Celli, que según los medios gráficos de la época se constituyeron en pilares, de un equipo que no recibió goles en contra de su valla en los tres partidos que jugó. 
Al regresar a la estación Rosario Norte, Libonatti, Sosa, Celli, Bearzotti y Saruppo, los cinco jugadores que representaron en gran forma al fútbol rosarino fueron agasajados por hinchas y dirigentes de la Liga Rosarina, que junto con el Semanario Reflejos organizaron una cena, donde hubo premios para los campeones sudamericanos.
El plantel argentino estuvo integrado por Américo Tesoriere (Boca Juniors),  Ernesto Kiessel (Huracán), Florindo Bearzotti (Belgrano de Rosario),  Pedro “Calomino” Fournol (Boca Juniors), Adolfo Celli (Newell’s Old Boys), Jaime Chavín (Huracán), Miguel Delavalle (Belgrano de Córdoba), Raúl Echeverría (Estudiantes LP), Vicente González (Gimnasia y Esgrima de Mza.), Julio Libonatti (Newell’s Old Boys), José  López (Boca Juniors), Alfredo Elli (Boca Juniors), Juan Salvador Presta (Porteño), Blas Saruppo (Newell’s Old Boys), Emilio Solari (Nueva Chicago) y Gabino Sosa (Central Córdoba).

Posiciones Campeonato Sudamericano de Selecciones 1921
1º Argentina 6
2º Brasil 2 (1)
3º Uruguay 2 (-1)
4º Paraguay 2 (-5)

Resultados
02-10-21 Argentina 1 (Libonatti) – Brasil 0
09-12-21 Paraguay 2 (Rivas y López) – Uruguay 1 (Piendibene)
12-10-21 Brasil 3 (Machado -2- y Candiota) – Paraguay 0
16-10-21 Argentina 3 (Libonatti, Saruppo y Echeverría) – Paraguay 0
23-10-21 Uruguay 2 (Romano -2- ) – Brasil 1 (Zezé)
30-10-21 Argentina 1 (Libonatti) – Uruguay 0
Nota: Todos los partidos se jugaron en el estadio de Sportivo Barracas.

Síntesis del partido definitorio
Jugado el domingo 30 de octubre de 1921
Argentina 1: Américo Tesoriere; Adolfo Celli y Florindo Bearzotti; José López, Miguel Delavalle y Emilio Solari; Pedro Calomino, Julio Libonatti, Blas Saruppo, Raúl Echeverría y Vicente González. DT: Pedro Calomino (*2).
Uruguay 0: Manuel Beloutas;  José Benincasa y Alfredo Foglino; Fausto Broncini, Alfredo Zibechi y Juan Molinari; Pascual Somma, Norberto Casanello, José Piendibene, Ángel Romano y Antonio Cámpolo. DT: Ernesto Fígoli.
Gol: 57’ J. Libonatti (ARG).
Árbitro: Pedro Santos (Brasil).
Cancha: Sportivo Barracas.
Público: 40.000 personas (*1).

Notas: (*1) Algunos diarios publicaron que hubo 35.000 espectadores.
(*2) Pedro Fournol, más conocido como Calomino, además de formar parte del combinado argentino, ofició de entrenador del equipo.

viernes, 26 de junio de 2015

El estadio Gabino Sosa, segunda parte

Cambio de orientación de los arcos.
Foto 1
Tras lograr en 1957 el ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino, las autoridades de la A. F. A. le exigieron al club Central Córdoba la ampliación de la capacidad de su viejo reducto de Virsasoro y Juan Manuel de Rosas, para que pueda ser utilizarlo en los partidos de la primera división. En el campeonato de 1958 el equipo de Tablada tuvo que efectuar sus compromisos de local en el estadio de Newell’s Old Boys, ya que su field no reunía las condiciones que pretendía la entidad madre del fútbol argentino. En diciembre de 1958 los dirigentes charrúas decidieron que tenían que jugar en su propia cancha para el torneo de 1959, por tal razón aprobaron la realización de las reformas, que comenzaron de inmediato. En el corto lapso de tres meses se construyeron dos nuevas tribunas en los costados norte y sur, se corrió la popular hacia el este, para cambiar la orientación de la cancha, ya que era la única forma de lograr las dimensiones exigidas por la A. F. A. Finalmente el campo de juego pasó de estar orientado de norte a sur a situarse de este a oeste, tal cual se lo puede observar en la actualidad. 
Merecido reconocimiento. El estadio es bautizado como Gabino Sosa.
En la cena en la cual el club celebro su 63° aniversario, realizada el 7 de noviembre del año 1969 se decidió homenajear a Gabino Sosa,  un baluarte del fútbol rosarino, que brilló en el conjunto de Tablada, en la selección rosarina y también nacional, por tal motivo el estadio de Central Córdoba fue bautizado desde esa noche con su nombre.

Un nutrido número de personas se aglomera en la puerta del estadio Gabino Sosa, para presenciar un partido en 1974.
Foto revista El Gráfico.

Foto1: Acto de inauguración del estadio, tras la reorientación de los arcos. 

sábado, 13 de junio de 2015

Cuatro jugadores de Rosario en el primer Campeonato Sudamericano de fútbol

Formación de la selección Argentina el día que goleó a Chile por 6 a 1. Parados de izquierda a derecha: Armando Reyes, Francisco Olazar, Juan Brown, Carlos Guidi, Gerónimo Badaracco y Pedro Martínez. Agachados: Juan Perinetti, Carlos Wilson, Alberto Marcovecchio, Alberto Ohaco y Adolfo Heissinger. 
Entre el 2 y 17 de julio de 1916, con motivo de cumplirse el centenario de la independencia de la República Argentina (9 de julio), se organizó en Buenos Aires un torneo de fútbol de carácter internacional, del cual formaron parte las selecciones del país anfitrión, Uruguay, Brasil y Chile.  El certamen fue considerado la primera edición del Campeonato Sudamericano de Selecciones, organizado por la Conmebol (Confederación Sudamericana de Fútbol), que se fundó con la competición en marcha, el 9 de julio de dicho año. Cabe destacar que la Copa América fue puesta en juego recién en la segunda edición, efectuada en Montevideo en 1917.
Cuatro jugadores de equipos pertenecientes a la Liga Rosarina formaron parte del combinado argentino, que disputó aquel torneo. Ellos fueron Zenón Díaz, los hermanos Ennis y Harry Hayes, de Rosario Central y Carlos Guidi, de Tiro Federal.
El domingo 2 de julio Uruguay goleó a Chile por 4 a 0, en el encuentro inaugural, jugado en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, ante tres mil espectadores.
Cuatro días más tarde, el jueves 6, en el mismo escenario debutó la selección Argentina, que despachó a su similar chileno por el categórico marcador de 6 a 1. El jugador tirolense Carlos Guidi integró el quinteto ofensivo del conjunto albiceleste esa tarde, que congregó a 18.000 personas. Luego dos días después Chile culminó su participación en el campeonato, tras igualar 1 a 1 frente a Brasil, cosechando así su único punto.
Quedaban por disputarse los compromisos entre Argentina, Uruguay (que tenían 2 puntos) y Brasil, que sumaba una unidad.
El lunes 10 de julio, un día después de la celebración por el centenario de la independencia Argentina, el elenco local sólo pudo igualar frente a los brasileños por 1 a 1. Nuevamente Guidi formó parte del equipo argentino, que comenzó ganando con un tanto señalado por José Laguna a los 10’, pero le empataron el cotejo a los 23’, con un gol marcado por Alencar.
Posteriormente el martes 12 la selección charrúa batió a Brasil por 2 a 1, triunfo que lo colocó puntero con cuatro puntos, uno más que el anfitrión, con quien debía medirse en el último partido del torneo.
El domingo 16, Argentina y Uruguay jugarían el cotejo decisivo en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, ubicada en Palermo. El elenco local necesitaba un triunfo para quedarse con el título, mientras que a la selección celeste, le alcanzaba con un empate para coronarse. Tal eran las expectativas para el encuentro, que desde temprano el público argentino comenzó a llegar a las adyacencias del estadio, para conseguir entradas, que se sobrevendieron, causando muy serios disturbios. La capacidad del estadio de 20.000 personas se vio desbordada al comenzar el cotejo, ya que las gradas estaban repletas de gente, incluso había espectadores dentro del perímetro del campo de juego. Dadas las condiciones se decidió suspender el partido. El enardecido público no contento con lo ocurrido prendió fuego las redes de los arcos, que fueron desmontados. Además el fuego llegó a las tribunas, tanto la oficial, como las populares.  El partido fue reprogramado para el día siguiente, en un nuevo reducto.  Finalmente argentinos y uruguayos se midieron en la cancha de Racing Club, que fue la elegida para la ocasión. Esa tarde los jugadores canallas Zenón Díaz, Ennis y Harry Hayes fueron titulares del once albiceleste, que no logró vencer a su oponente. El empate sin goles, favoreció a Uruguay, que se consagró campeón.
El plantel argentino estuvo integrado por los siguientes futbolistas; Arqueros: Carlos Isola (River Plate), Juan José Rithner (Porteño) y Carlos Tomás Wilson (San Isidro); Defensores: Juan Brown (Quilmes), Arturo Chiappe (River Plate), Zenón Díaz (Rosario Central) y Armando Reyes (Racing Club); Mediocampistas: Gerónimo Badaracco (San Isidro), Cándido García (River Plate), Pedro Martínez (Huracán), Ricardo Naón (Gimnasia LP) y Francisco Olazar (Racing Club); Delanteros: Claudio Bincaz (San Isidro), Juan Cabano (Argentino de Quilmes), Carlos Guidi (Tiro Federal), Ennis Hayes (Rosario Central), Harry Hayes (Rosario Central), Adolfo Heissinger (Tigre), Juan Hospital (Racing Club), José Laguna (Huracán),  Alberto Marcovecchio (Racing Club), Alberto Ohaco (Racing Club) y Juan Nelusco Perinetti (Racing Club).  

Resultados
02/07/1916 Uruguay 4 (44’ y 75’ José Piendibene; 55’ y 70’ Isabelino Gradín) – Chile 0
06/07/1916 Argentina 6 (2’ y 75’ Ohaco; 60’ y 62’ Brown-ambos de penal-; 67’ y 88’ Marcovecchio) – Chile 1 (44’ Telésforo Báez)
08/07/1916 Chile 1 (84’ Hernando Salazar) – Brasil 1 (40’ Demósthenes)
10/07/1916 Argentina 1 (10’ J. Laguna) – Brasil 1 (23’ Alencar)
12/07/1916 Uruguay 2 (58’ I. Gradín y 77’ José Tognola) – Brasil 1 (8’ Arthur Friedenreich)
17/07/1916 Argentina 0 – Uruguay 0
Nota: Todos los partidos se disputaron en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Bs. As., salvo el último cotejo, que luego de ser suspendido se jugó en el estadio de Racing Club.

Posiciones Campeonato Sudamericano de Selecciones 1916
1º Uruguay 5
2º Argentina 4
3º Brasil 2
4º Chile 1

martes, 9 de junio de 2015

La cancha de Argentino en barrio Industrial

Inédita foto del año 1937 de la cancha de Argentino en barrio Industrial .
En el año 1924 el club Nacional (denominación que adquirió en 1915 y cambió en 1935 por su actual nombre de Argentino) se trasladó entre las calles Gorriti e Iguazú, en pleno barrio Industrial. En un principio la cancha poseía una modesta casilla de madera, un alambrado, donde se colocaban lonas para evitar que se vean los partidos desde afuera y unos pocos tablones, que se asemejaban a una tribuna. Luego el reducto contaba con una humilde tribuna construida en uno de sus laterales, más tarde se amplió la capacidad del estadio y se levantó una grada de tablones de madera en el lateral opuesto a la tribuna que ya se encontraba. Asimismo es importante remarcar que por algunos años fue vecino del club Tiro Federal, que tuvo su cancha en el terreno lindero a la del salaíto.

Allí permaneció hasta el año 1943, cuando el club decidió inscribirse en la Asociación del Fútbol Argentino, como ya lo habían hecho Newell’s, Rosario Central y Central Córdoba. Pero la afiliación no le fue aceptada, puesto que el estadio con que contaba no reunía las condiciones adecuadas que requería la A.F.A. Por tal motivo era necesario efectuar nuevas remodelaciones en su vieja cancha de barrio Industrial. La comisión directiva quiso comprar un lote lindero donde se encontraba una casa para poder construir otra tribuna. El dueño del inmueble, que cuentan era el lechero del barrio, se negó a vender su vivienda, por lo tanto el salaíto tuvo que buscar otro lugar para erigir su estadio. 
Finalmente al año siguiente inauguró su estadio de barrio Sarmiento, donde sigue emplazado en la actualidad. En su nuevo reducto debutó en la segunda categoría del fútbol argentino frente a All Boys, con quien empató 2 a 2. 

El estadio del salaíto de Gorriti e Iguazú hacia principios de la década del ’40. Nótese las ampliaciones con respecto a la imagen de 1937. 

viernes, 29 de mayo de 2015

Copa Centenario de la Revolución de Mayo

Jugadores de la selección Argentina, que disputaron la copa Centenario Revolución de Mayo en 1910. Entre ellos podemos ver a Harry Hayes, cruzado de brazos en el centro de la imagen, luciendo unos bigotes y a José Viale, el último de izquierda a derecha. 
Entre los días 29 de mayo y 12 de junio de 1910 se disputó la copa Centenario Revolución de Mayo, con motivo de la celebración de los cien años de dicha gesta patria en la República Argentina. Del torneo amistoso de carácter internacional, participaron las selecciones de Argentina, Chile y Uruguay.
En el equipo de la selección Argentina que disputó el evento se destacaron tres jugadores de la Liga Rosarina de Football. Ellos fueron Manuel Paulino González y José Viale de Newell’s Old Boys y Harry Hayes de Rosario Central. Una clara demostración de la importancia del fútbol en la ciudad de Rosario, que ya por aquellos lejanos años le aportó talento al combinado nacional.
Dos días antes del inicio del triangular, el viernes 27 de mayo, midieron fuerzas los combinados de Argentina y Chile, en la cancha de Belgrano Athletic Club en Buenos Aires.
El elenco albiceleste se impuso por 3 a 1, con goles de Pinoto Viale, Maximiliano Susán y Harry Hayes. En tanto que Simmons, anotó para el cuadro trasandino.
Cabe remarcar que ese fue el primer enfrentamiento internacional del seleccionado de Chile. Asimismo ese día hicieron su debut con la camiseta albiceleste Harry Hayes y Manuel Paulino Lito González, mientras que también fue de la partida Armando Ginocchio (Newell’s) -le atajaron un penal-, quien posteriormente no jugó los dos encuentros de la copa.  
Luego el domingo 29 de mayo comenzó el certamen. En el primer encuentro Uruguay batió a su similar chileno por 3 a 0, con goles de Piendibene (5’), Brachi (75’) y Buck (85’). El cotejó se efectuó en la cancha de Colegiales, donde asistieron seis mil personas.
Una semana después, es decir el domingo 5 de junio hizo su debut el conjunto  anfitrión, que doblegó con holgura a Chile, tras imponerse por 5 a 1, en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, sita en el barrio porteño de Palermo. Esa tarde se lucieron los delanteros de los clubes rosarinos, José Viale, que abrió el marcador a los 16’ y Harry Hayes, que señaló a los 26’ y 40’. Los restantes goles fueron anotados por Weiss a los 66’, Susán a los 82’ (ambos argentinos) y Campbell a los 49’ (Chile).
Argentinos y uruguayos llegaron al último partido con dos puntos cada uno, por lo que el choque entre ambos definiría el título. El domingo 12 de junio en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, ante ocho mil espectadores, Argentina goleó a Uruguay por 4 a 1. A los 16’ José Viale señaló la primera conquista del cotejo, luego Harry Hayes estrió la ventaja del local a dos minutos de finalizar el primer período. A los 5’ de iniciado el complemento Watson Hutton convirtió el tercero. Ocho minutos después José Piendibene descontó para el seleccionado charrúa y finalmente Susán anotó el tanto final a los 64’. Con ese magnificó triunfo la selección albiceleste se quedó con la copa Centenario de la Revolución de Mayo.  Es preciso destacar la notable actuación que tuvieron en el torneo los futbolistas de los equipos de Rosario, ya que José Viale señaló dos goles y Harry Hayes tres, siendo el goleador del triangular.
Ese pequeño torneo amistoso, fue el primero de carácter internacional jugado por selecciones en Sudamérica y además fue el puntapié inicial para que seis años después se llevara a cabo el primer campeonato sudamericano, organizado por la Conmebol.